Jorge L. García Vázquez
Berlín
Roberta Jacobson viajará nuevamente este fin de semana a La Habana.Su elegante peinado recibirá los rayos solares, cercanos al equinoccio de primavera, del "socialismo tropical ", mientras sus tacones sonarán armoniosos por las calles de la capital cubana.
Josefina Vidal, directora de la División de América del Norte del Ministerio de Relaciones Exteriores, la estará esperando, vestida de negro o blanco?, y juntas intentarán hacer todo lo posible para alcanzar lo que sus jefes desean.Durante la segunda ronda de negociaciones, a unos pasos de la Casa Blanca, habló de "acercar posiciones".
La Seguridad del Estado tomará las medidas de protección adecuadas y desconectará, para esta ocasión, la técnica de escucha y visual secreta.No es necesaria la vigilancia. Josefina Vidal estará a su lado y como especialista de inteligencia al servicio de Relaciones Exteriores como muchos otros diplomáticos cubanos, entre ellos el actual embajador de Cuba en Alemania René Mujica Cantelar, conoce perfectamente su misión y sabe que el Presidente Obama está consolidando al régimen de los Castros.
Un ex-oficial de la Stasi, del departamento de desinformación y medidas activas, me mencionaba en una ocasión que las agencias de espionaje y contra-inteligencia occidentales subestimaron la preparación y los conocimientos de los agentes de penetración y de influencia del campo socialista en "Psicología Operativa", una asignatura aprobada por los agentes cubanos.
Ya estamos en marzo y viene a mi memoria la Primavera Negra del año 2003, los arrestos de los opositores y periodistas independientes, muchos de ellos firmantes y activistas del Proyecto Varela,las altas condenas, las medidas de descomposición y terror aplicadas a las familias de los presos políticos. Recuerdo el dolor y la tristeza de los que, dentro y fuera de Cuba, alzamos la voz contra la injusticia.
Reviso las fotos y veo a Laura Pollán y a Oswaldo Payá.Nunca olvidaré mi encuentro en Berlín con ex-presos políticos del Grupo de los 75, desterrados, después de pasar varios años injustamente en las mazmorras castristas y entendí porqué el Tirano ordenó a encarcelarlos: Sus corazones están limpios de odio, violencia o codicia.Pienso en las palabras del fallecido preso político Antonio Villareal:“Lo que siempre me pregunto es quién va a responder por estas heridas, aun cuando logremos sanarlas”
Estas preguntas no las pueden responder Roberta Jacobson ni Josefina Vidal. Las heridas solo comenzarán a cicatrizar cuando exista un diálogo crítico y abierto entre el régimen y la oposición, cuando la verdad salga a la luz .